A pesar de que el café colombiano es uno de los más conocidos y aclamados. El café mexicano se está convirtiendo, en estos últimos años, en uno de los mejores cafés de especialidad. Es por eso que hoy vamos a hablar de este café, y en especial de nuestro café de México.
México, uno de los países exportadores de café
Las condiciones climáticas de México son ideales para la plantación y el cultivo del café. La mayoría de los cafés gourmet de este país se producen en pequeñas fincas orgánicas centradas en producir café de especialidad.
La mayoría de los cafés que se cultivan en México son en fincas de gran altura. Esto influye en la acidez, el sabor (mucho más concentrado) y el dulzor de la baya. Esto se debe a que los granos crecen con mayor lentitud en altura, lo que hace que con frecuencia sean granos de mayor calidad. Además, en estas regiones suele haber unas condiciones particulares (el terreno, la incidencia solar y las precipitaciones) que hacen que tomar un café 100% arábica sea una experiencia única.
Nuestro café de México
Este magnífico single origin proviene de la finca Olotla, ubicada en la población mexicana de Ixhuatlán, dónde trabajan más de cuatrocientos agricultores de la zona de Veracruz para obtener las mejores cerezas de café de sus fincas cafeteras. Cada grano de café ha sido recolectado, limpiado y dejado en remojo durante, aproximadamente, seis horas, para posteriormente despulpar una parte de su cereza natural, dejando el 45% de ella en contacto con los granos de café. A continuación, se somete el café a una fermentación aeróbica de seis horas más (proceso Red Honey), para lograr estabilizar los mejores sabores del fruto antes de secarlo al completo.
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